Luis de Góngora y Argote (1561-1627) nació en Córdoba de una familia noble, acaso de conversos.

Se educó en la casa paterna y, después, estudió Cánones, en Salamanca hasta 1581. Fue racionero de la Catedral de Córdoba en 1585, herencia que recibió de su tío, y viajó por Madrid, Valladolid y Cuenca.

Por su conocida generosidad, precisó la protección del marqués de Ayamonte y del duque de Lemos.

Es posible que dedicara parte de su juventud a aventuras amorosas de tono menor y otras diversiones, como el juego, a juzgar por la amonestación que, en 1588, recibe del Obispo.

Desde 1580 comienza a escribir poesías: sonetos y romances, ante todo, de muy diferentes temas.

BIOGRAFIA LUIS DE GÓNGORA Y ARGOTEFue amigo de Paravicino, Villamediana y Pedro de Valencia, por lo cual, influyó en la predicación religiosa.

En 1609 lo encontramos en una breve visita por Madrid, de la que debió recoger enemistades y desangaños.

Vuelto a Córdoba, entre 1612 y 1614, escribe el Polifemo y las Soledades, sus obras más conocidas.

De aquí su enfrentamiento más directo con Quevedo y Lope de Vega.

Aunque sus obras fueron comentadas por escrito en vida del poeta, como si fuera un clásico, no llegó a ver impresas más que algunas poesías menores en cancioneros.

En Madrid, en 1617 fracasó en sus aspiraciones cortesanas, pero, tras ganar una capellanía en Palacio, se ordena sacerdote e intenta proteger a sus familiares con cargos parecidos.

Pretende favores del duque de Lerma, a quien dedica su Panegírico (1617) y de Rodrigo Calderón, sin éxito.

Arruinado y enfermo, logró la protección de su familia en Córdoba, en 1626, donde muere un año después.

Despreciada por críticos como Menéndez Pelayo, su poesía fue revalorizada por la generación poética de 1927.