Ya ves que nada pudo,
contigo amor,
ni las pruebas de los años
ni los celos infundidos
ni las aventuras secretas
ni el beso furtivo
ni las ansias nocturnas
del deseo prohibido
ni las ausencias obligadas
del enojo torturante
Ni siquiera, amor,
el desdén o el odio...
la rabia o la risa
la alegría o la tristeza...
Tampoco el naufragio de tu vida...
Ya ves que nada pudo,
contigo amor...