Encinta de sol,
colmada de tu barro limpio y firme
vas trasmutando mi cuerpo
en viva flor que destila rocío tras tu ruta.

Vegetal,
el temblor de mis dedos
trenza cuencas azules
y transitan por tus ojos
leves hiervas de fiebre
y fértiles vagidos que me anuncian.

Matriz plena de sol, de Ti,
cuando gritas que mi cuerpo
es un cáliz de substancia amanecida;
de tus manos
cuando aullan tus dedos
y mi piel tan suave...

Matriz de cauce pleno:
...Ni siquiera una rosa colmaría tu abismo
si este sol que te llena se perdiera
en el azul de un ángelus tardío.