¡Qué pase la luz! ¡que pase!
mientras la algarabía amaga el aire
explotando en luces de colores
hay una fiesta y es la de la virgen

(mas el día está sumido en una vasta niebla)

el ladrido de los perros, los pájaros invisibles
y el grito helado de un niño que pide una toalla
convergen en el silencio de
una mujer que sueña como el día
entre vapores de agua.