Esta es la patria de los robles

aquí olvidaron

su guitarra

los grillos

y en ellas

nacieron ciudades

y memorias



Esta ciudad es grande

los muros que la protegen

están construidos

de huesos

y sombreros



Aquí no hay sol

y llueven piedras

cuando alguien quiere verlo



La noche se prolonga

y sus racimos

se pudren

en nuestras vidas



El recuerdo hiede

y nos carcome



Los pájaros mueren

antes de levantarse de las cenizas



Un río corre a unos metros

y en sus cristales

las figuras se detienen

beben estío

y regresan a sus sombras



Una antorcha

se enciende bajo la lluvia

y un rayo muere

en el mismo instante

que los centauros brindan

por el frío de los robles