Soy la pipa de un escritor:
Dice bien claro mi pergeño
De cafre, que tengo por dueño
Un refinado fumador.

Al agobio de su labor
Se agita mi flabel risueño
Igual que el penacho hogareño
A la vuelta del labrador.

Mecer su corazón yo gusto
En el móvil azul arbusto
Nacido en mi boca de fuego.

Y extiendo con mi beso ardiente
Sobre su espíritu doliente
Unción de encanto y sosiego.