...que todo lo concibe sin crearlo.
MUERTE SIN FIN



Dios es glaciar
y estepa:

sabana de incandescencia,
plancha del mundo.

Eclipsado por la nada
huelga el pensamiento
vuelto agora
siberia de sal,
raso cristálico;

o, dicho de otro modo,
fulge dorado por la ausencia
de resoluciones.

Sobre el espéculo del juicio
quedan sólo atenuándose
las figuraciones del vaho.

Como un ajedrez de polvo
en el rellano
de una escalera
poco frecuentada.