CONTROL DEL EGO
El ego es una máscara que llevamos puesta desde hace muchos años y estamos fundidos en ella. No sabemos diferenciar que es lo que hacemos por nosotros mismos y lo que hacemos por la manipulación del ego.

Si queremos satisfacer nuestro ego, debemos estar dispuesto a entregar el control de nuestra vida a terceras personas.

UNA VACUNA PARA EL EGO
El poder es una droga adictiva que se engancha a nuestro ego y nos es difícil dejarla; por ejemplo existen personas que fueron empresarios exitosos; pero que sus empresas fracasaron entonces estas personas ya no tiene poder y es frecuente verlos deprimidos, porque han perdido su poder y con él su sensación de valía y competencia personal (ya no tienen la droga y no saben cómo encontrarla).

No olvidar lo que nos hace feliz y reconocer que nos llevo al éxito;Nuestra propia capacidad.

LOS ERRORES Y EL EGO
No escuchar a los demás, no estar abiertos a nuevas opiniones negándonos así la retroalimentación y/o aprender.
Toda la infelicidad que existe nació del EGOISMO.

LA BATALLA DE LA VIDA ENTRE DOS PILOTOS
En nuestra mente existen dos adversarios muy poderosos el ego y el espíritu.
Nuestro cuerpo es como un auto que tiene dos pilotos: el ego y el espíritu.

El ego quiere ganar la carrera a toda costa, para que el resto lo admire como el mejor; al espíritu, en cambio le interesa disfrutar el camino, conducir en paz, servir y ayudar a las personas con las que se cruce.

El Ego permite vivir en un mundo de fantasía donde solo nosotros tenemos la razón.
Si observamos el interior veremos la realidad, el deseo, y necesidad que pide para ser felices.

RESUMEN EL ESPEJO DEL LIDER - David Fischman¿SABER VALORAR LO QUE TIENE?
Cuando una persona no se siente competente o valorada, busca lo negativo en los demás, se realza así mismo y se siente superior; siente que nada es suficiente para él ocultando su inseguridad; y no ve lo increíble y bueno que tiene.

Aprendamos a ver lo increíble en las organizaciones y personas con las que convivimos y no esperar hasta perder lo que tenemos para sólo entonces descubrir su verdadero valor.

CUANDO EL CLIENTE NO TIENE LA RAZÓN
Cuando un cliente compra un bien, es porque tiene una serie de necesidades que desea satisfacer; pero el problema se presenta cuando la necesidad del cliente es reafirmar su valía y competencia personal a través de la agresión y negatividad hacia los demás.

La tendencia de hoy es hacer lo imposible para que el cliente se sienta satisfecho; sin embargo ante un cliente agresivo lo peor que puede hacer la empresa es hacerle caso. El necesita sentirse poderoso pidiendo lo imposible y nunca quedará satisfecho; él que no está buscando realmente servicio o producto, sino únicamente elevar su ego.

LA VERDADERA RIQUEZA
La verdadera riqueza la encontramos sólo cundo somos felices; para lograr la felicidad existen ciertas necesidades básicas que debemos cubrir con el fruto de nuestro trabajo; el trabajo, los bienes materiales y los logros son un medio para obtener la felicidad.

Para Anthony de Mello, vivimos nuestra vida orientada hacia el futuro, pensamos que en el futuro seremos felices, “cuando compre el carro, o la casa”, “cuando me vaya de viaje”, “cuando mis hijos crezcan”, “cuando me asciendan”, “cuando logre mis metas”.

Pero la única forma de encontrar la felicidad es viviendo y disfrutando el presente; la felicidad está en las cosas que hacemos y no en las que tenemos; ejemplo cuando ayudamos a otros de forma desinteresada, cuando compartimos momentos con nuestra pareja, hijos y amigos o cuando cultivamos nuestra espiritualidad.

SON LOS NEGOCIOS UNA GUERRA
El mundo empresarial ha sido comparado con la guerra; las empresas utilizan tácticas para combatir en su mercado, en el mundo empresaria los ejecutivos inmersos en la competencia saben de que están peleando una cruel batalla; están combatiendo por su mercado, defendiendo sus posiciones y tratando de capturar nuevas. Están concentrados en lograr sus propias metas, destacar y hacer crecer su empresa.

Si nuestra competencia saca un mejor producto, no nos aterroricemos por el miedo de perder el mercado; en cambio debemos concentrarnos en como servir mejor al cliente y como crear nuevos productos que le den más felicidad y satisfacción al cliente.