Tomás Eloy Martínez vivió en el exilio y escribió este relato conmovedor e inolvidable en busca de la memoria que no pudo tener.

Con maestría avanza sobre la débil línea entre verdad e ilusión, y expande la misma más allá de los límites del género.

Un lenguaje austero al servicio de una historia tan extraña como intensamente real da por resultado la mejor obra de un autor señalado como clásico por la crítica internacional.

En el invierno de 1976 Simón Cardoso es detenido por los militares que impusieron una dictadura sangrienta en la Argentina, y nunca más aparece.

Treinta años más tarde, su mujer, Emilia Dupuy, se paraliza al oír su voz en una fonda de suburbio en New Jersey. El mundo, que se había desmoronado con la tragedia, recobra su luz. Excepto por un detalle: Simón sigue fijo en la juventud. El tiempo no ha transcurrido para él.

A partir de ese enigma, Purgatorio enlaza la ansiedad del amor perdido y recuperado con una reconstrucción magistral de la irrealidad siniestra creada por el régimen.

Sobre los mapas que trazaba esta pareja de cartógrafos se dibuja el de un horror invisible: no se muestran los campos de concentración sino la locura que los hizo posibles, en la que caben autopistas faraónicas, un mundial de fútbol y el patriotismo inflamado por una guerra insensata.

La degradación moral va apoderándose de una sociedad que acepta como verdad única cada nueva invención del poder.